Una vez que hayas hecho los ejercicios pasa a tocar las partituras.
Uno de los momentos más complicados a la hora de tocar el acordeón es coordinar las dos manos.
Las
manos tienden a ir a la misma velocidad y lo que debemos conseguir es
que actúen independientemente, para ello estos ejercicios son básicos.
Estos
primeros ejercicios debes estudiar las dos manos por separado y cuando
tengas la seguridad de que dominas las dos manos por separado, puedes
lanzarte a tocar con ambas manos unidas. Esto debería ser una regla
general para todos los ejercicios de manos juntas.
Las
dos manos deben sonar al unísono, es decir, simultáneamente. Solo
podrás considerar perfectos los ejercicios cuando suenen sin ningún
fallo.
Los
fallos más comunes suelen ser, confundirse de botón, detenerse en un
compás para buscar el botón, notas cortadas por no manejar el fuelle
convenientemente, quedarse sin aire en el fuelle y parar para abrirlo,
encontrarse con el fuelle demasiado abierto siendo muy difícil su
control, etc..
Ahora
el acordeón va a gastar más aire que cuando hemos trabajado las manos
separadamente y por tanto como dificultad añadida esta el control del
fuelle con la válvula del aire.
Que no cunda el pánico, a partir de ahoraexígete mucho, para correr hace falta primero saber andar.
Si consigues hacer estos ejercicios correctamente habrás avanzado mucho.
Una vez que hayas hecho los ejercicios pasa a tocar las partituras.